¿Que es lo que hacemos cuando vemos a una persona por primera vez? Lo que sabemos que no deberíamos hacer; intentar hacernos una idea de qué tenemos ante nosotros. Es un proceso automático aunque digamos que no. Pues anoche paseé con un vagabundo casi dos horas y claro, en los primeros 20 minutos intenté desembarazarme de él pues solo pensaba en lo sucio que iba y lo mal que olía todo el asunto... pero había elegancia en lo que intentaba contarme, me dí cuenta que su narración me hacía pensar en muchas cosas que se supone que sabemos, porque son las cosas realmente importantes, ¿No?
No importa la apariencia; ¡YA LO SABEMOS! No importa la educación; ¡YA LO SABEMOS, PESADO! No importa de donde vengamos, ni siquiera importa quienes hemos sido ¡QUE SÍ, QUE SOMOS PROGRES!!
Naranjas de la china. Este mundo ha puesto ante nuestros ojos cosas para tenernos entretenidos y de paso, arrancarnos eso, las cosas importantes para hacernos pensar en otras como el "tanto tengo tanto valgo" que enarbolamos sin hacernos cargo de lo que nos estamos haciendo a nosotros mismos.
El desarrapado aquel me hizo seguir el camino a la inversa: me arrancó todo lo superfluo de este mundo confuso y me obligó a mirar en el corazón de las relaciones humanas... y me dejó ahí un ratito... para que me tomara mi tiempo... para que doliese.
Una mujer le dijo una vez algo que funciona a modo de síntesis de todo el armatoste, cuando ya no tenían nada más que a ellos mismos, cuando lo único que quedaba era la maldita carretera, le dijo convencida gracias a su experiencia en la vida: "yo no quiero sobrevivir"
Lo único importante es lo que llevamos dentro.
¿Que qué hago hablando de esto cuando debería hablar de la película? Puñetas: podéis averiguar de qué va la maldita cinta en mil sitios distintos: los leones de tierra tenemos un ojo empeñado en mirar en cualquier dirección, menos en la que mira el otro ojo y claro... pasa lo que pasa.
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